¿Cómo
educar a los padres sobre la prevención del Virus Papiloma Humano?
El Departamento de Salud
de Puerto Rico anunció los requisitos de vacunación para iniciar el año
escolar. En dicho anunció exhorta a los
padres sobre educarse de la infección del virus de papiloma humano, su relación
con cáncer y la vacuna contra este. Se
les orienta que el VPH se transmite a través del sexo, a diferencia de
infecciones como varicela, tosferina y sarampión, que se pueden adquirir de alguien
en el salón de clases por contacto casual.
El VPH es el factor de riesgo más importante para cáncer de cuello uterino. La infección persistente también puede
resultar en el desarrollo de cáncer en la vulva, pene, boca, garganta y
ano. La tasa de cáncer cervical en
Puerto Rico es el más alto (11.7 por 100,000) en comparación a los Estados
Unidos y sus territorios (7.4 por 100,000).
Las mujeres puertorriqueñas sufren mayor carga de cáncer cervical que
las mujeres blancas no hispanas en los Estados Unidos y tenemos una mayor
incidencia y mortalidad por cáncer oral y de pene en hombres en comparación con
blancos no hispanos en los Estados Unidos. En los años 2010 a 2014 cerca del 5%
de todos los nuevos cánceres en varones y 7% en mujeres son cáncer asociado a
VPH.
La vacunación contra VPH
constituye una iniciativa de salud pública importante. La vacunación se considera la intervención
más efectiva para el control de la enfermedad relacionada con estos virus. La vacuna, formulada a partir de subunidades proteicas,
no infecciosas; tiene un perfil de seguridad similar a otras vacunas. Además, ha sido ampliamente probada durante
años, constantemente monitoreada para posibles eventos adversos y la incidencia
de estos es baja. Los estimados de la efectividad,
en general corresponden a resultados de eficacia obtenidos en los ensayos clínicos
que demuestran la seguridad, inmunogenicidad y eficacia de la vacuna en la prevención
de infecciones por VPH y lesiones precancerosas; especialmente si se administra
antes de la exposición al virus. Otro
argumento es el derecho de los padres a decidir sobre la salud de sus hijos. La vacunación es una intervención médica, y a
primera vista podíamos pensar que es innecesario forzar a los padres hacer que
sus hijos se sometan a una intervención o tratamiento médico. También se recomienda para niñas de 13 a 26
años de edad y para niños de 13 a 21 años de edad, que no hayan recibido la
vacuna. Por lo tanto, si su hijo o hija no ha comenzado o finalizado la serie
de vacunas contra el VPH, no es demasiado tarde.
Tenemos que orientar al adolescente
que este sexualmente activo o si ya comenzó a tener relaciones sexuales, es
importante hablar de ello. Asegúrese de que su adolescente sepa cómo se
transmiten las ETS (durante el sexo anal, oral o vaginal) y que estas
infecciones frecuentemente no presentan síntomas, así que es posible que la
pareja tenga una ETS sin que lo sepa. Proporcione
los hechos y deje que su hijo sepa lo que usted piensa. También es importante que todos los
adolescentes se les realicen exámenes físicos completos, los cuales pueden
incluir análisis en busca de ETS. Es
recomendable que su adolescente consulte a un ginecólogo o especialista en
medicina para adolescentes para hablar acerca de los problemas de salud sexual.
Las organizaciones de salud de la comunidad y los centros de asesoría sexual en
su área local también pueden ofrecer orientación.
Referencias:
Centro de Control y Prevención de Enfermedades(CDC).
(julio de 2013). Las Enfermedades y las Vacunas para prevenirlas.
Obtenido de Virus Papiloma Humano:
http://www.salud.gov.pr/Sobre-tu-Salud/Documents/Vacunacion/VPH
Iris Cardona- Meaux. (2017). Vacuna
contra el VPH, herramienta segura en la prevención de cáncer. Obtenido de
Departamento de Salud de Puerto Rico:
http://www.salud.gov.pr/Sobre-tu-Salud/Documents/Vacuna